martes, 23 de abril de 2013

Oye tú


         





            Oye .

Sí sí , la de la sonrisita tonta.

La que se esconde el pelo detrás de la oreja cada vez que se ruboriza.

La que con un baile de caderas tiene al mundo entero bajo sus pies.

            Sí sí las del cuerpo perfecto al que mejor sientan los holgados jerséis de verano.

La morena de ojos castaños que un día robo mi corazón y no lo ha devuelto todavía.

La que mató a un poeta de una sonrisa.

Y se jugó la vida a un burdo cara o cruz del destino.

Y ganó.

La misma que con una simple mirada me desgarra de pies a cabeza como un simple folio en blanco.

La de la mirada perdida, que busca una cara en la que fijarse.

La que no sabe donde diablos se ha metido, pero se siente a gusto.

La que llora lagrimas amargas como la hiel pero dedica sonrisas mas dulces que el mejor néctar.

La que es naufraga en un mar de dudas sin fin.

Sí sí .

Que Te Quiero…

                                                                    R.

domingo, 21 de abril de 2013

Siempre tuyo.


Amiga,

Dios me libre de decir algo que pueda ofenderte, mas no tengo intención alguna que no sea complacerte.

Maldigo el momento en que te abrí la puerta de aquel precioso BMW ya que ambos sabemos que el día después nunca nos viene bien.

Y aquí me encuentro, derrochando lagrimas una vez mas a son de nuestro “Quédate”, mientras el olor a tabaco inunda por primera aquel cuarto en el que jamás tuviste permiso para fumar.

Si, saladas unas, otras amargas pero sin duda as mejores son las dulces, que son las que tantos recuerdos llevan en ellas.

Como olvidar el momento en que todo esto empezó y lo rápido que pasa el tiempo, a ritmo de mis latidos que ahora mismo ni el mejor cardiólogo entendería porque no estoy en shock, cosa que no descarto.

            Solo espero que como tantas otras veces, dejemos nuestras tonterías a parte que somos los mejores idiotas pero no tan cabezotas como para tirar 4 meses a un cenicero al borde del colapso.

            Por muy poco que solucione solo quiero que sepas que te quiero, que siempre te quise y que jamás dejare de quererte, pues tu eres mi musa y por os siglos de los siglos seguirás siendo quien dé luz a mi arte, siempre tuyo.

                                                                                 R.










martes, 16 de abril de 2013

Roce de mejillas


Que puedo contar que el mundo no sepa ya. Que cada vez que sonríe el mundo se ilumina lo suficiente como para cegarnos a todos, ingenuos algunos, los que no se dan cuenta de que cuando amanece es cuando ella se despierta. El mundo no sabría de faldas de uniforme ni de ni de sexo apasionado de no ser por ella.

Inspiración divina de otro planeta...

            Cada vez que te mira sientes su cálida y penetrante mirada sobre tu piel, y por un instante te sientes en casa. Con un simple cruce de miradas es capaz de quitarte la vida. Y también de dártela.

            Que puedo contar que el mundo no sepa ya. Que cuando roza su mejilla con la tuya es como una descarga eléctrica ilegal. Que es el ángel de mis sueños y el diablo de mis pesadillas. Que inundo mi mundo desde que su bordería empezó a hacer efecto sobre mi. Que no me canso de mirarle a los ojos y decirle… “Que te quiero”.

            Que se que me miráis con envidia al saber que soy el hombre de su vida y el dueño de sus piernas. Que sus curvas, perfectas como las mejores pinceladas de la mejor obra del mismísimo Van Gogh no tienen comparación con su sonrisa, con esos ojos de felino al acecho de su presa.

            Me quita el sueño. Y me da la vida.
           
            Es el punto sobre la i, la gota que colma el vaso, el ultimo aliento de la muerte, es ella. 

Ella es mi musa.